Este encuentro está dedicado a profundizar y comprender las figuras e influencia de los padres en nuestra vida y a realizar un cambio para sanar las heridas pasadas. Saber cómo nos ha condicionado nuestra manera de ser, de sentir y de pensar. Dar respuesta a las preguntas ¿Cómo he tenido que ser delante de mi padre, de mi madre y cómo no he podido ser? Si en la familia no se admiten, o se rechazan, las demostraciones afectivas, o si me dicen que “con ese genio nadie te querrá”, por ejemplo, ¿Cómo me afecta, qué hago, y qué he hecho con lo que siento?

Abordamos las emociones del amor, la rabia, la tristeza o la vergüenza, que no pudieron ser vividas en nuestro núcleo familiar, no siempre desde una experiencia presente, sino desde un filtro que no podemos percibir.

En este taller, con un enfoque gestáltico, exploraremos los mensajes que nos hemos "tragado" y que hicimos nuestros, pero que no lo son, pues no responden a nuestra necesidad presente. Revisaremos mensajes como: “llorar es de débiles”,” tienes que ser perfecta”, “has de ser fuerte” o “tienes que tirar hacía adelante”, etc., muchos de ellos ligados a una indebida imagen interna de nuestros progenitores.

Descubriremos que sí que es posible cambiar sin renunciar a nuestro auténtico ser y que precisamos poner al día nuestra relación parental. Arriesgarnos, en definitiva, a que nos vean como somos y no por como esperan que seamos. El perdón, la autoestima, el amor y la legitimización de nuestros sentimientos habrán de formar parte de una salida más saludable.

Este trabajo está incluido en la Formación en Terapia Gestalt de la Escuela Eleusis. En caso de no formar parte de ella es preciso una entrevista previa.